El Ejército Simbiótico de Liberación y el secuestro de Patty Hearst

Uno de los grupos extremistas más peculiares que ha visto Estados Unidos y el mundo fue sin duda el Ejército Simbionés de Liberación (Symbionese Liberation Army, SLA), cuya actuación en 1974 se convirtió en unas las mayores noticias de ese año.

Se trataba de una clásica organización de ultraizquierda, pero que incluyó elementos sicodélicos (como el concepto de simbiótico y un logotipo bastante extraño) en su pensamiento. Mal que mal, eran los años ‘70.

Formado por un puñado de estudiantes de San Francisco, saltaron a la fama mundial luego de secuestrar a Patricia Hearst, nieta del fundador del imperio de noticias William Randolph Hearst, cuya vida retrató Orson Welles en “Ciudadano Kane”.

El plagio ocurrió a punta de pistola desde el departamento de Berkeley donde vivía la joven (de 19 años) el 04 de febrero de 1974 en la noche, cuando una desconocida llegó pidiendo teléfono.

La víctima, que estaba sola, la dejó pasar, tras lo cual aparecieron dos sujetos que portaban fusiles, los que se introdujeron al departamento. Un vecino alcanzó a escuchar que Patricia gritaba dramáticamente “¡No por favor, no a mí!”, pero ya era muy tarde. 

El motivo del secuestro era canjear a Patty, de 19 años en ese momento y próxima a casarse con su conviviente, el profesor Steve Wedd, por dos militantes del SLA recluidos en la cárcel de San Quintín, acusados de ser los responsables del asesinato del superintendente de escuelas de Oakland, Markus Foster, a quien acusaron de querer “uniformar” a los niños por entregarles un carné de identificación.

Luego del secuestro, la radio KFPA de San Francisco recibió este peculiar comunicado:

Ejército Simbionés de Liberación

Unidad de adultos regional oeste

Comunicado # 3, 4 de febrero de 1974

Materia: Prisionera de guerra

Objetivo: Patricia Campbell Hearst, hija de Randolph Hearst, enemigo del pueblo.

Orden de detención: Arrestarla y ponerla bajo custodia y, si se resiste, ejecutarla.

Búsqueda ordenada por: La Corte del pueblo.

En la fecha señalada arriba, elementos combatientes de las Fuerzas Federadas Unidas del Ejército Simbionés de Liberación, premunidos de armas cargadas con cianuro, diligenciaron una orden de detención pendiente en contra de Patricia Campbell Hearst. Fue una orden de la corte que el objetivo fuera arrestado por unidades combatientes y llevado a un área de seguridad y sólo para comunicar su condición a la unidad #4, para dar publicidad a este hecho. Fue orden de la Corte que ningún elemento civil fuera dañado, SÓLO durante esta acción y que, sólo si fuera necesario, debían efectuarse disparos de advertencia. Sin embargo,si algún civil intentaba ayudar a las autoridades a interferir con la ejecución de esta orden judicial, ellos debían ser eliminados de inmediato. Esta Corte notifica al público que entregó instrucciones a las unidades combatientes para que disparen contra cualquier civil que intente interferir o observar cualquier operación realizada por las fuerzas populares contra el Estado fascista. Ante cualquier intento de las autoridades por rescatar a la prisionera o arrestar algún miembro del SLA, la prisionera será ejecutada. Ella es mantenida en un estado físico y mental adecuado y no ha sido dañada, estado que se mantendrá cuanto sea posible. Su protección está compuesta de combatientes y unidades médicas, para guardar tanto a la prisionera como su salud. Todos los comunicados de esta Corte DEBEN ser publicados completos en todos los diarios y en cualquier forma de medio de comunicación. Las fallas en esto irán en detrimento de la seguridad de la prisionera.

Habrá más comunicados.

SLA

Muerte al insecto fascista que predica sobre la vida del pueblo

Pese a que la idea inicial era el canje, posteriormente “Cin”, el líder del grupo (compuesto por no más de 12 personas, aunque ellos alardeaban que eran miles), creyó que una buena oportunidad de hacerse notar públicamente -la peor debilidad del SLA era su afán de publicidad, que los hacía montar en cólera si estimaban que las noticias acerca de ellos eran muy pequeñas- era lograr que los Hearst dieran comida a los pobres.

Posteriormente, en una cinta de audio enviada a la misma radio, el SLA ordenó que Hearst padre entregara comida “de calidad” a todos los californianos pobres. Según la cinta, cada canasta de comida debía contener dos tutos de pavo, dos cajas de jugo de tomate y dos latas de carne, entre otras cosas.

Amo a mi(s)  secuestrador(es)

Hearst padre gastó cerca de dos millones de dólares en comida, pero la joven no fue liberada.

El fenómeno que ocurrió a continuación, según ella misma lo relata en su autobiografía, fue una mezcla de complacencia hacia sus torturadores, el ansia de supervivencia y convicción de que hacía lo correcto. Debido a que usaron con ella técnicas de control mental propias de una secta (estuvo meses encerrada en un closet, fue vejada sexualmente e adoctrinada, en este caso, sobre marxismo), la mujer comenzó a sentir simpatía por sus captores, en un cuadro sicológico diferente del síndrome de Estocolmo, en el cual la empatía con los secuestradores se produce en forma automática y voluntaria y no forzada, como en esta situación.

Según ella lo expuso en una cinta de audio enviada días después a su madre “desearía que trataran de entender la posición en que estoy. Estoy justo en el medio y estoy dependiendo de lo que un montón de otras personas hacen“.

Dos meses después del secuestro, la familia Hearst recibió un nuevo casette de Patricia, en el cual les anunciaba que renunciaba a su nombre y que de ahí en adelante se llamaría “Tania” (seudónimo utilizado por Tamara Bunge, conviviente del Che Guevara) y que había decidido “quedarse y pelear”. El 15 de abril, las cámaras del Hibernia Bank de San Francisco (banco de propiedad de los padres de  la mejor amiga de Patty) captaron las caras de varios asaltantes que se llevaron 10 mil dólares e hirieron a dos guardias. Uno de los rostros allí captados fue el de Patricia Hearst.

La fotografía de la joven portando una subametralladora se hizo mundialmente famosa. Un mes más tarde, el 16 de mayo, ella y otros dos miembros del SLA tuvieron un enfrentamiento con la policía en una tienda de deportes de Los Angeles, logrando escapar gracias a que llevaban un rehén (Thomas Dean Matthews, de 18 años).

Al día siguiente, en el histórico condado de Watts (donde estalló la primera revuelta afroamericana, en 1965) la policía encontró una casa de seguridad del grupo, produciéndose un gigantesco tiroteo que terminó cuando la vivienda se incendió, muriendo seis miembros del SLA, entre los que no estaba ella.

Tres semanas más tarde, Patricia-Tamara envió otra cinta, en la que decía que en dicho enfrentamiento habían matado a “Cujo, el más gentil y hermoso hombre que he conocido. Nunca Cujo (cuya identidad era William Wolfe, de 22 años) ni yo habíamos amado de la forma que lo hicimos. El establecimiento de nuestra relación fue también nuestro compromiso con la lucha y el amor por nuestro pueblo“.

Gracias a esa cinta, el asunto se puso más claro. El 18 de septiembre de 1976 fue arrestada en Nueva York, iniciándose el juicio más famoso de EE.UU. hasta el de O.J. Simpson. Su abogado alegó que ella había sido coersionada a actuar como lo hizo.

Cuando le tocó hablar, Patty alegó que la habían encerrado en un closet por varias semanas, que habían abusado sexualmente de ella y luego fue enfrentada a la opción de “unirse o morir”.

Finalmente fue sentenciada a diez años de cárcel, pero salió a los 23 meses gracias a un beneficio que le concedió el presidente James Carter. Antes de recuperar su libertad, se enamoró de un guardia de la prisión en que estaba, un hombre de 33 años.